24 mar 2011

Novio de Tarifa Plana



Mi tía, que se había hecho muy devota y amiga de San Antonio, me regaló un novio por mi cumpleaños. Era un novio por tarifa plana, porque mi tía tenía una pensión más bien cortita.
Llegaba los lunes por la mañana, echaba 4 horitas en mi compañía los días laborables y el viernes se marchaba con otras tarifadoras, dejándome aplanada y no compuesta los fines los fines de semana.
Mi tía y mi novio habían llegado a este acuerdo tras muchas y prolongadas negociaciones. Habían proporcionado suelo a mi alma y desconsuelo a mi cuerpo.
A veces, por sobrecarga en horas punta, Quisto, que así se llamaba el mozo, llegaba un poco tarde, y cuando digo "llegaba un poco tarde" era a todo y para todo. Esos días, yo los dedicaba a reconciliarme con mis macetas para serenar mis ánimos, quitaba pulgones y araña roja de la dama de noche y recortaba los tallos taladrados por oruguitas de los geranios.
No es que yo sea desagradecida, pero es que lo de que "a caballo regalado no le mires el diente" es un truco lingüístico de quien te regala algo para que te calles y te tragues lo que te haya traído sin rechistar. Mi tía podría haberse estirado un poquito más y mi Quisto también podría haberse regalado un poquito menos a otras aspirantas, lagartonas ellas.
Mi vida llegó a ser un mar de tendones desquiciados, dientes rechinados, vellos erizados y laringitis con afonías sofocantes.
Me fui a la oficina de novios por tarifa plana a protestar y allí conocí a Nicanor.
Es un loro amable que sofroniza mis meninges con los ruiditos de su pico, el rascar de sus patitas en los barrotes de la jaula y el magnífico colorido de sus plumas. Compartimos pipas que pela él o pelo yo, y nos reímos a carcajadas al unísono con una felicidad locuela de barrio bajo.
Estoy aprendiendo a hacer la manicura francesa y otros decorados ungulares en las garras de mi lorito. Él me frota la cara con su cabecita y me repite la primera frase que aprendió de mí con voz algo gangosa.
Así que, en vez de irme a llorar al convento, ahora estoy en el paraíso.

13 comentarios:

  1. Mi adorada Cobaltos. Las tarifasplanas y los buffets libres son un timo. Al final siempre quieres salirte de lo plano y es cuando te crucifican. Tú eres más de escoger a la carta. Porque tú lo vales. Porque si no, no podría estar riéndome de nuevo con tu Nicanor.

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  2. No sólo haces amistades con tu loro, sino con una legión de bichitos que te apartan de la circulación ¡no te privas de nada, hija!
    Echaba de menos esas plumas coloristas por el ciberespacio y ese piquito de oro que te caracteriza.
    Un abrazo

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  3. qué decir, xrisstinah, que te has sacado de la ancha manga un cuentecillo fabuloso...

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  4. Es que em compro las batas de ancha manga en el "Todo a chen", y los cuentos también..

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  5. ¿Tiene vozarrón ese loro o más bien vocecilla atiplada?

    Un saludo

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  6. Hobreee...
    teniendo en cuenta que la voz de Nicanor es copia bastante fiel de la de la protagonista, tiene voz de marinero adicto al ron.
    La vida del mar es muy dura.

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  7. Si es que nadie está contento con las tarifas planas! A mí me regalaron otro de esos pero a la hora de la verdad y sin ropa no tenía ni la mitad de megadetalles que se suponía, así que lo devolví. Eso sí... no vi ningún loro en la oficina... ¿Me prestas el tuyo?

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  8. ... y lo vuelvo a repetir... ¡ MERVEILLEUX !

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  9. ¿Quién fue el que marcó "infumable"?
    Será por lo de la ley antitabaco por que el texto es bueno, bueno y requetebueno (casi gurmótico, vamos).

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  10. jajjaja ¿gurmótico?, eso es de las catedrales, ¿no?

    Dejad que los fumadores se acerquen a mí.

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  11. Me encanta tu riqueza de vocabulario y sobre todo de imaginación... Saludos de lunaxana.

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  12. Gracias Lunaxanarancha, tenía abandonados a los dos (vocabulario e imaginación).

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